Partiendo de la novela Human Capital del estadounidense Stephen Amidon, Virzì fragmenta su relato en tres capítulos, focalizados en otros tantos personajes, un prólogo y un epílogo, estableciendo vínculos probablemente involuntarios tanto con las estrategias narrativas scorsesianas –con el lejano eco de Malas calles (1973)- como con esa fértil veta de películas –del Pulp Fiction (1994) de Tarantino al 21 gramos (2003) de Iñárritu, pasando por el Viviendo sin límites (1999) de Doug Liman y el Crash (2004) de Paul Haggis- que han empleado un acontecimiento traumático –con frecuencia, un accidente de tráfico- como centro de gravedad de sus narrativas centrífugas y atomizadas. La estructura es, precisamente, una de las grandes libertades que se ha tomado el cineasta con respecto al original literario: no menos radical supone su decisión de sustituir Connecticut por Briganza y, en consecuencia, moldear la caracterización de los personajes en arquetipos verosímilmente italianos, pero que, al mismo tiempo, resultan pertinente y dolorosamente universales.
El noviazgo ya tocado de muerte entre una joven de clase media y un chico de alta cuna propicia un insidioso juego de espejos entre clases sociales, dominado por especuladores sin demasiada preocupación por los daños colaterales, tipos patéticos que arriesgan sus frágiles economías deslumbrados por quiméricos fondos de inversión y angustiadas esposas burguesas dispuestas a aliviar soledades y sentimientos de culpa comprando un teatro como quien se compra un bolso de Vuitton. La película reparte igualitariamente su vitriolo entre todas las clases sociales –incluso el humilde tío que cuida al personaje más desamparado de la función recibe lo suyo-, pero contrapuntea su ferocidad con un particular cuidado, atravesado de clara empatía, en la definición de sus personajes principales. Es una lástima que el desenlace opte por matizar ligeramente la contundencia de este inclemente retrato coral regido por la ensimismada crueldad de los tiempos
Título original
Il capitale umano
Año
2014
Duración
109 min.
País
Italia
Director
Paolo Virzì (filmografía)
Guión
Paolo Virzì, Francesco Bruni, Francesco Piccolo (Novela: Stephen Amidon)
Música
Carlo Virzì
Fotografía
Jérôme Alméras, Simon Beaufils
Reparto
Valeria Bruni Tedeschi, Fabrizio Bentivoglio, Valeria Golino, Fabrizio Gifuni, Luigi Lo Cascio, Giovanni Anzaldo, Matilde Gioli, Guglielmo Pinelli
Productora
Coproducción Italia-Francia; Indiana Production Company
Género
Drama